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Con el inicio del año, la prensa especializada recuerda que hace casi 12 meses comenzaron las negociaciones para renovar el convenio colectivo en el sector de Ahorro. La próxima reunión será el 14 de enero y reconoce que habrá dificultades para llegar a algún tipo de acuerdo con la ACARL. Incluso, los periódicos salmón anuncian movilizaciones más intensas y contundentes que las que llevamos a cabo el pasado otoño, en octubre y diciembre, para defender un convenio colectivo justo y sin recortes.

La postura de la patronal apenas se ha movido en los últimos meses. Sigue empeñada en reducir derechos ya adquiridos e imponer condiciones con las que no estamos de acuerdo como la ampliación de la jornada laboral o de los radios de movilidad geográfica hasta los 50 kilómetros, entre otras propuestas que no estamos dispuestos a aceptar.

Todo apunta a que se avecina un invierno “calentito” si la ACARL se mantiene en sus trece.

Mientras, esta semana, otro revés, en este caso, judicial. El Tribunal Supremo ha avalado el segundo Expediente de Regulación de Empleo Temporal (ERTE) en Liberbank, el acordado en diciembre de 2013. El Supremo niega que la entidad actuase de mala fe a la hora de negociar el ERTE y rechaza los argumentos de los sindicatos, entre ellos CSICA, para anular el proceso. Así las cosas, vamos a estudiar la posibilidad de recurrir ante el Tribunal Constitucional. Os iremos informando.

Con el 2016 recién iniciado, se aceleran los rumores de fusiones entre las entidades de tamaño mediano. Precisamente Liberbank, Bankia y BMN ocupan las primeras posiciones entre las favoritas. Bankia es la preferida, según algunos analistas. Y otros apuntan a que una fusión entre Liberbank y BMN sería estratégica en el sector.

Para este año, que ha empezado con la convulsión en las bolsas asiáticas, la banca tendrá que enfrentarse a la inestabilidad económica y política dentro y fuera de Europa. La economía global se sustenta sobre Estados Unidos, China y la Unión Europea; de cómo respiren depende, en gran medida, el futuro de todos. Un futuro que se percibe de forma más optimista, según el último Indicador de Confianza Empresarial en España que señala una visión más positiva para los próximos meses, según los empresarios; aunque, las expectativas para el empleo no son todavía demasiado halagüeñas.