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Ésa es la pregunta que nos hacemos en CSICA ante la situación que vive Liberbank y la actitud de la Dirección de la entidad.

Los dirigentes de Liberbank se han comprometido, ante las autoridades monetarias nacionales y europeas, a acometer los planes de recapitalización, ajustes, y viabilidad de Liberbank antes de que finalice el mes de junio, con el menor coste posible para el erario público. 

Consideramos que la Dirección de Liberbank es la máxima responsable de la mil millonaria cartera crediticia tóxica cedida a la SAREB, a cambio de una propina. También apuntamos que es culpable de la nefasta expansión acometida hace años y que generó el cierre de 160 oficinas en 2011, a las que se sumarán las 86 previstas para este año.  Esta situación ha supuesto que muchos trabajadores estén pagando el pato desde entonces y que otros muchos se vean expuestos en breve.

En CSICA tememos que, en un breve periodo de tiempo, Liberbank nos pueda presentar otro ERE para extinguir contratos de trabajo, con medidas traumáticas para los empleados afectados. Todo ello teniendo en cuenta la desorganización, exigencias, angustias, presiones y miedo que sufre la plantilla, ante el desproporcionado cúmulo de exigencias que, día tras día, se imponen a los trabajadores. Cada día, se cercenan derechos a los trabajadores y la única salida que nos queda es usar la vía judicial.

Desde octubre de 2012 hay abierta una Mesa de Negociación Laboral en la que, a fecha de hoy, no se ha negociado nada, pese a nuestra insistencia, y a que nos hemos desplazado hasta en cinco ocasiones a Madrid para reunirnos, sin resultado.

Además, gracias a la Dirección de Liberbank los clientes se han convertido en los paganos de la capitalización del banco, al imponerles bajo un dudoso y supuesto principio de voluntariedad, un canje al modo de “son lentejas; o las tomas o las dejas”. Y aquellos que no han aceptado el canje, ahora se encuentran con que el FROB ha decretado una quita del 61,6%, que se parece mucho a un expolio.

Con todos estos datos, la reflexión que hacemos desde CSICA es que no podemos tolerar que el banco se capitalice a costa de nuestro esfuerzo y nuestro salario, y nos preguntamos “¿alguien se subiría a un barco al mando del comandante del Titanic o del Costa Concordia?”

COMPAÑEROS: POR TODO ELLO, NO PODEMOS TOLERAR QUE EL BANCO SE CAPITALICE A COSTA DE NUESTRO ESFUERZO Y DE NUESTRO SALARIO, TAL Y COMO HAN SUFRIDO LOS CLIENTES DE HÍBRIDOS CON EL CANJE. SIGAMOS EL EJEMPLO DE LOS COMPAÑEROS DE BANKIA, NOVAGALICIA BANK, BANCO DE VALENCIA, CAJA 3, Y OTRAS. ¡LA UNIÓN HACE LA FUERZA, Y LA FUERZA SOMOS TODOS UNIDOS: TRABAJADORES Y SINDICATOS!