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Seguimos igual. O incluso peor. La última reunión, prevista para el día 1, fue suspendida por problemas de agenda. La siguiente será el 10 de diciembre, pero nos tememos que no va a haber avances.

Los tres sindicatos mayoritarios del sector de Cajas de Ahorros, CSICA, UGT y CCOO hemos decidido convocar a los empleados y empleadas a asambleas y concentraciones para reclamar lo que consideramos nos corresponde: un convenio justo y sin recortes.

El 9 de diciembre, el próximo miércoles, habrá asambleas informativas en Barcelona, Madrid, La Coruña, Sevilla, Málaga, Santa Cruz de Tenerife, Las Palmas de Gran Canaria, Valencia, Valladolid y Zaragoza. Os informaremos de la gravedad de la situación en la mesa del Convenio y de las razones que nos llevan a mantener e intensificar las movilizaciones.

Tras esas asambleas, secundaremos concentraciones en Madrid (sede de Bankia, torres Kio) y Barcelona (sede CaixaBank, Avenida Diagonal) el 14 de diciembre.

Y, mientras, seguimos recogiendo firmas en el sector para defender nuestros derechos y un Convenio laboral acorde a la situación real, no al panorama que pinta la ACARL.

Mientras aquí luchamos por un convenio justo, los bancos europeos siguen adelgazando sus plantillas para abaratar costes laborales aunque son conscientes de que lo peor de la crisis ya ha pasado. En lo que va de año, seis grandes de la banca europea como RBS, HSBC, Deutsche Bank, Unicredit, Barclays y Standard Chartered han anunciado recortes de personal que afectan a 145.200 empleados.

En cuanto a los bonus de los banqueros, el Banco Central Europeo (BCE) apuesta por vincular la retribución variable de los directivos a la solvencia de la entidad.

La agencia europea de calificación de riesgo Scope augura más concentración y regulación en el sector financiero español. Los analistas concluyen que hay muchos bancos pequeños que deberían fusionarse para mejorar su rentabilidad y competitividad.

Y hablando de competitividad, Banco Santander es el único español que figura en el ‘top 30’ mundial, que está liderado por entidades norteamericanas. La crisis ha sacado de ese listado a la mitad de la banca europea y sólo quedan siete entidades del viejo continente. De hecho, Alemania, sin ir más lejos, se ha quedado sin representación, y Francia e Italia, al igual que España, se han quedado con uno solo.