La situación en Evo Banco ha sido noticia esta semana y lo seguirá siendo en los próximos días. El anuncio por sorpresa de nuevos recortes, lanzado por la entidad, ha generado la repercusión que nos podíamos imaginar. El vicepresidente primero de CSICA-Evo, Pedro Luis González Bueno, declaró a El Correo Gallego que la propuesta de la entidad no es de recibo ya que los seiscientos trabajadores en plantilla son artífices del milagro de sumar 10.500 nuevos clientes al mes, sin contar con más armas que una atención de calidad. González Bueno mostró su preocupación por las familias que podrían perder el empleo y por la que sería la tercera rebaja en los salarios de los empleados.
Otra entidad que podría sufrir recortes en breve es Abanca. La dirección ha entregado un informe técnico en el que justifica modificaciones en las condiciones laborales en un futuro a corto plazo. La dirección argumenta criterios de eficiencia para justificar cambios organizativos y salariales en los trabajadores. El proceso se encuentra actualmente en periodo de consulta. El banco pretende que 190 oficinas abran por las tardes, y que el conjunto de los empleados tengan un horario flexible, en función de las necesidades de cada sucursal. En el apartado salarial, busca equiparar a la baja las retribuciones de sus trabajadores con las del resto del sector bancario.
Y otros temas salariales, pero bien distintos. Bankia ha iniciado una investigación sobre posibles irregularidades en los sueldos de la etapa de Blesa y Rato. La finalidad es comprobar si se cumplió con la normativa vigente. Precisamente, en una semana en la que se han cruzado acusaciones entre el ministro de Economía, Luis de Guindos, el Banco de España y la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) por el caso Bankia.
Todo esto, mientras el hasta ahora director general del FROB, Antonio Carrascosa,se despedía de sus colegas en el Ministerio de Economía, el Banco de España, de la banca en general y de Bankia en particular, para abordar nuevas responsabilidades en Europa, donde va a ocupar uno de los puestos directivos del FROB europeo.
El jueves el Banco Central Europeo (BCE) convocó la segunda macrosubasta de crédito de la que se esperaba mucho, aunque el resultado no fue tan abultado como se preveía. La banca española ha pedido más de 41.000 millones de euros, según los datos publicados por Europa Press. Las solicitudes realizadas por las mayores entidades españolas (Banco Santander, BBVA, Caixabank, Banco Sabadell, Banco Popular, Bankia y Bankinter) han ascendido a 35.752 millones. Mientras, Kutxabank (1.121 millones), BMN (742,7 millones), Ibercaja (917,3 millones) y Liberbank (760 millones) han captado en su conjunto 3.541 millones.
Un informe de la Comisión Europea y el Banco Central Europeo constata la mejoría de la economía española que, incluso, crecerá a un mayor ritmo que la media de la eurozona en 2015, pero advierte del alto nivel de endeudamiento en nuestro país, lo que será un punto de vulnerabilidad para continuar la senda con la que salir de la crisis.
En materia de reformas laborales, el informe denuncia que "la aplicación de medidas para hacer más eficaces las políticas activas de empleo a la hora de reducir el paro está avanzando sólo gradualmente". La Comisión y el BCE lamentan además que "no hay nuevas reformas previstas para hacer frente al alto grado de dualidad en el mercado laboral".
Mientras tanto, en Europa aumentan los organismos, instituciones y procesos para poner orden en el ámbito financiero como MUS, MUR, BRRD, BAIL-IN O FRD. Un galimatías de siglas que los actores del sector tendrán que aprender si quieren estar al día de las ayudas y programas que pondrá en marcha Bruselas.
Según un estudio de Gestha, España recaudaría 8.250 millones de euros anuales si la carga fiscal de las multinacionales se equiparara a la de las pymes, que actualmente pagan de media un 16% sobre su resultado contable positivo, frente al escaso 5,3% de tipo efectivo de las compañías trasnacionales, apenas un tercio de la tributación real de las pymes. Según los cálculos que manejan los técnicos de Hacienda, las grandes corporaciones transnacionales se ahorran al año el pago de 30.000 millones.
Para los que estén interesados en invertir en bolsa, Santander, BBVA, CaixaBank, Bankia, Popular, Sabadell, Bankinter y Liberbank son las entidades que han subido con más fuerza en los últimos meses. Para el 2015, el potencial se concentrará además en Unicaja, Ibercaja, BMN, Kutxabank o Cajamar según apunta la gestora Fidentiis.
Y una curiosidad, el coste medio de la deuda del Tesoro cae a su mínimo desde el siglo XIX. La rentabilidad de los títulos en circulación se redujo en noviembre hasta el 3,46%. Las emisiones de este año se han realizado a un interés medio del 1,56% a 30 de noviembre, en lo que también supone un récord histórico.